La gestión de recursos y fondos para poder seguir operando ha sido sin duda una de las grandes preocupaciones de las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) que ahora con la contingencia provocada por el COVID-19 han visto mermadas sus fuentes de ingreso. Muchas de las OSC en el estado de Querétaro que dependen en gran medida de las donaciones se han visto afectadas con los recortes de las mismas por parte de las empresas o personas que donan recurrentemente y que debido a la crisis económica han reducido sus apoyos económicos.

A pesar de que los donativos son una fuente importante de ingresos para muchas OSC en el estado de Querétaro, no lo son para la gran mayoría ya que, de aproximadamente 720 OSC que hay en el estado sólo 203 cuentan con la autorización por parte del SAT para recibir donativos deducibles de impuestos y de éstas sólo 92 cuentan con autorización para recibir donativos nacionales y por parte de los Estados Unidos (SAT, 2021); esto quiere decir que sólo el 28% del total de OSC en el estado cuenta con esta autorización, lo que podría representar un área de oportunidad para aquellas organizaciones que buscan incrementar sus fuentes de financiamiento y que, después de evaluar todas las implicaciones, optan por realizar este trámite ante el SAT.

 

De la información con la que se cuenta hasta el día de hoy por parte del SAT sobre las Donatarias Autorizadas se sabe que para el año 2017 los ingresos por donativos para las OSC Donatarias Autorizadas en el estado representaron el 27% de los ingresos totales, mientras que para el 2018 representaron el  29% de los ingresos totales obtenidos; el resto de los ingresos han tenido que ver con otros mecanismos de financiamiento como son el cobro de cuotas de recuperación, venta de productos y servicios, eventos de procuración de fondos y financiamiento público.

Los donativos recibidos de origen nacional durante el 2018 representaron el 98% de los ingresos en efectivo y el 100% de los donativos en especie lo que da una idea sobre la importancia de contar con este tipo de financiamiento y la oportunidad que representa la búsqueda de donativos de origen extranjero. Los servicios asistenciales y educativos son las actividades que más practican las organizaciones donatarias y también son las actividades que cuentan con mayor financiamiento.

Durante este periodo de contingencia el contar con la autorización para ser Donataria Autorizada ha sido un factor clave para muchas OSC, pues a pesar de que se estima que el 79% de las OSC a nivel nacional han sufrido afectaciones económicas y financieras (PulsoOsc, 2020) debido a la disminución de ingresos derivados de las cuotas de recuperación, cancelación o suspensión de eventos de procuración de fondos, etc., los donativos han representado (aunque todavía de manera insuficiente) una alternativa para acceder a las diversas convocatorias e iniciativas para la atención y respuesta de las OSC como lo han sido el “Fondo Comunidades Activas”, la campaña “MXDona”, la “Campaña Nacional Por México (Campaña xMX)” o la iniciativa “Querétaro es uno”.

Es recomendable seguirle apostando a la profesionalización del sector para poder obtener la autorización para ser Donataria Autorizada, contar con un contador público  especializado en el régimen de personas morales con fines no lucrativos, capacitarse y mantenerse actualizado sobre las obligaciones legales y fiscales, así como mejorar las capacidades en la procuración de fondos; de igual manera es importante que las OSC le apuesten a mantener una cultura de transparencia y rendición de cuentas pues esto brinda mayor credibilidad y confianza a las personas e instituciones donantes.

 

 

Leopoldo Vázquez
Investigación y Evaluación

 

 

 

 

 

 

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